Fiesta del Corpus Christi: El Inicio

Fiesta del Corpus Christi: El Inicio June 2, 2013

 

Durante el verano de 1263, Pedro de Praga viajó a Roma llevando consigo muchas dudas sobre su fe y su vocación sacerdotal.  Fue en una peregrinación para rezar junto a la tumba de San Pedro. Después de recuperar sus fuerzas espirituales y calmar sus dudas, Pedro inició su viaje de regreso, descansando por la noche en la localidad de Bolsena al norte de Roma.
Temprano en la mañana antes de celebrar Misa en la tumba de la mártir Cristina del siglo III, la fe de Pedro fue sacudida nuevamente. Agobiado al considerar a esta joven quien murió voluntariamente por Cristo, Pedro de Praga pidió a Dios, “por la fuerza del alma y por ese abandono extremo que Dios da a quienes confían totalmente en él.”
Mientras celebraba la Misa, la hostia comenzó a sangrar. La sangre salpicó sobre el corporal del altar, paño colocado debajo del cáliz y la patena. Sorprendido y entusiasmado, Pedro viajó a la ciudad aledaña de Orvieto, para describir lo que había sucedido al Papa Urbano IV. El Papa envió inmediatamente a su representante para transportar el corporal a Orvieto para ser inspeccionado. Su representante hizo como le dijeron, y una vez llegado el corporal a Orvieto, se mantuvo en la catedral y ya no regresó a la pequeña localidad de Bolsena.
Después de un año el Papa Urbano IV declaró la Fiesta del Cuerpo y Sangre del Señor, Corpus Christi, que 749 años más tarde la celebramos dos semanas después de Pentecostés. Urbano encargó a Santo Tomás de Aquino, quien en aquel momento vivía en Oriveto, a escribir la liturgia para la nueva fiesta. De esta comisión Santo Tomás dio a la iglesia el hermoso himno Pange Lingua, que termina con el bien conocido Tantum Ergo.
El Milagro Eucarístico de Orvieto sirve como un recordatorio de las palabras de Jesucristo, “si no comen la carne del hijo del hombre y beben su sangre, no tienen vida en ustedes. Quien come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna, y yo lo levantaré el último día. Porque mi carne es verdadera comida y mi sangre es verdadera bebida”.
Es un recuerdo extraordinario de una simple verdad: que Jesucristo verdaderamente viene a nosotros bajo la apariencia de pan y vino. A través de su presencia sacramental, Dios nos nutre al darnos de comer el pan del cielo.
No habremos experimentado un milagro como Pedro de Praga, pero Jesús nos recuerda, “benditos son aquellos que no han visto, pero sin embargo creen.” Es posible ver el antiguo corporal en la Capilla del Corporal en la magnífica catedral de Oriveto, pero más magnífico es nuestra habilidad de recibir el Cuerpo y la Sangre de Cristo nuestro Señor, cuales son verdadera comida y verdadera bebida.

 

Iglesia de Santa Cristina, Bolsena

 

 

Altar donde Pedro de Praga fue testigo del milagro eucaristico
Catedral de Orvieto

Misa de Corpus Christi en la catedral de Orvieto

Capilla del Corporal, Orvieto
Procesion de Corpus Christi, Orvieto 2007

 

 

Procesion de Corpus Christi, Orvieto 2007
Preparando el camino para la procesion de Bolsena con petalos de flores

Procesion Eucaristica de Bolsena

Camino de la procesion eucaristica de Bolsena

Con un amigo en Orvieto.  Tuvimos el honor de cargar el anda con el corporal y Santisimo Sacramento por algunas cuadras durante la procesion

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